Las verdaderas cadenas de la esclavitud

El otro día, no me acuerdo donde, escuché a una persona decirle a otra: "¡Jo tío es que no me pude controlar!"   Me he parado a pensar en estas palabras y he llegado a la conclusión de que estoy en profundo desacuerdo con ellas. Para empezar, todo ser humano dispone de fuerza de voluntad, que es esa capacidad de gobernar su conducta intencionadamente y desde la razón.

La razón juega un papel importante ya que es la que permite reflexionar sobre las consecuencias de cada acto y de ahí, que la inteligencia también intervenga en este proceso. Es esta mezcla entre voluntad e inteligencia la que nos hace capaces de discernir entre lo bueno y lo malo, en otras palabras, nos hace libres.

Si la persona es incapaz de dominarse a sí misma es que no es del todo libre y por lo tanto no puede sentirse realizada completamente. Y yo me pregunto ¿Qué mayor felicidad que saber que gobernamos nuestros actos?

"Las cadenas de la esclavitud solamente atan las manos; es la mente lo que hace al hombre libre o esclavo"  Franz Grillparzer

Jesús M